Querida audiencia: feliz año.
Vengo a contarles que este blog sobre errores de los medios en Colombia prácticamente se escribe solo. Me paso más tiempo pensando en qué dejar por fuera que viéndome en la dispendiosa tarea de buscar tema. Así que realmente no me necesitan para que les cuente todas las cosas de las que quizás ya saben, sino que quizás les pueda ser útil como curador o, más bien, digamos como “gurú” (que eso paga mejor) de esto del afán de los medios colombianos.
Hoy, por ejemplo, lo que puedo hacer por ustedes es contarles una historia, una historia que, a pesar de estar llena de falacias, sigue siendo verdadera. La historia comenzó el primero de enero de este año cuando los estados de Colorado y Washington en Estados Unidos comenzaron a vender marihuana legalmente dentro de sus fronteras.
La historia continuó el 2 de enero cuando The Daily Currant publicó una historia diciendo que 37 personas habían muerto en Colorado por sobredosis de marihuana. Pero esta historia llegó a su cúspide cuando, el 3 de enero, el senador uribista (pero de La U) Juan Carlos Vélez demostró su infinita sapiencia sobre la marihuana, esa misma contra la que tanto ha despotricado.
Con un solo tweet, de un solo zarpazo, puso en evidencia que ignoraba que The Daily Currant es un portal de contenido satírico (es decir, de noticias falsas), así como que ignoraba que la única persona que se ha muerto de sobredosis de marihuana en la historia registrada del planeta ha sido un personaje de un cuento de Cortázar.
Ante tal revelación (no la de los 37 muertos, claro, porque esa no era revelación, sino la de que el senador Vélez no sabía ni dónde estaba parado), esta historia continuó con una seguidilla de chistes en twitter y artículos en los medios burlándose del buenhombre, lo que lo llevó a esta reacción:
Ya se imaginarán la oleada que vino después de que un senador de la República lamentara que no fuera cierta la muerte de 37 personas. Vélez de todas maneras intentó contener los daños. Borró sus dos tweets y los cambió por este:
Por fortuna la noticia de sobredosis de marihuana no era cierta, pero insisto que consumo de esta droga es perjudicial para nuestra sociedad
— Juan Carlos Vélez U. (@jcvelezuribe) January 3, 2014
Y podríamos decir que aquí acaba la historia de Juan Carlos Vélez, pero realmente lo importante es que aquí inicia realmente la historia de un pueblo, de un pueblo tan aguerrido como aburrido, tan noble como “desparchado”.
El 6 de enero, quizás inspirado por los hechos que acabo de relatar, aunque quizás no (¿cómo voy a saber?) salió al aire Actualidad Panamericana, nuestro The Onion, nuestro The Daily Currant para que nos entendamos, nuestro propio sitio colombiano de noticias falsas. Ese histórico 6 de enero, la “AP” criolla abrió con un épico “Por un heladino de ron con pasas le aplican nueva ley de conductores ebrios” y desde entonces nos han deleitado con joyas como “Cierran criadero de enanos en El Espinal” y “Controversia por funeraria que se promociona como ‘la oficial del rally Dakar’”.
Pero, desde los inicios de Actualidad Panamericana, ha sido evidente que hasta los comentaristas del sitio creen que las noticias que allí se reportan son verdaderas. ¿Y cómo no, en este país de cerdos diabólicos y penes cercenados? ¿Cómo no creer en lo absurdo de lo que pasa en este país, en lo que las personas de más de 60 años, o que han leído demasiadas crónicas malas llaman “realismo mágico”?
No es como si en la página dijera: “Actualidad Panamericana es un sitio web satírico cuyo único fin es el entretenimiento. Todos sus contenidos son ficción y no se corresponden con la realidad. Todos los referentes, nombres, marcas o instituciones que aparecen se usan como elementos contextuales, como en cualquier novela o relato de ficción”. Ah, no, sí, eso es justo lo que dice aquí.
Así que, al contemplar las posibilidades y potencialidades de este sitio, sabíamos que simplemente teníamos que sentarnos a esperar, que pronto llegaría el día prometido, el evento esperado por todo un pueblo. ¿Cuál sería la fecha? No lo sabíamos. ¿Quiénes serían los protagonistas? No importaba. Pero todos los ávidos consumidores de noticias de la patria sabíamos que llegaría, que lo veríamos, que un día un medio nacional creería que una de las noticias de Actualidad Panamerica era cierta.
Sólo tuvimos que esperar dos semanas, pues el lunes 20 de enero en Blu Radio pasó esto. Sí, la “mesa de trabajo” de Mañanas BLU armó una discusión sobre un comunicado que Actualidad Panamericana se había inventado en su artículo “Unión Europea pide a colombianos dejar de pedir que les regalen cosas”.
En el texto que ahora acompaña a la grabación en la página de la emisora se lee el intento desesperado de algún pasante intentando salvar patria: “A partir del que sería un falso comunicado de la Unión Europea publicado en Facebook sobre los perjuicios y discriminación que le trae a los colombianos fuera del país el uso reiterado de la expresión ‘me regala’ al pedir cosas, varios analistas de Mañanas BLU reflexionan acerca de la costumbre de usar diminutivos”. Pero en los gloriosos once minutos y medio de grabación nos dimos cuenta de que ninguno de los integrantes de la mesa se detuvo a pensar en que quizás la Unión Europea tenía cosas más interesantes que hacer que inventarse una campaña sobre un modismo del español colombiano.
Apenas uno de ellos (¿María Alejandra Villamizar?, perdón, estoy flojo en mi farándula radial), por unos breves segundos (hacia el 4:40) planteó la pregunta de por qué se iban a preocupar tanto los europeos por algo que pasa en una lengua que sólo se habla en uno de sus países. Los demás, por alguna razón, se quedaron con la idea de que esto venía de “una fuente de la Cancillería” (como dijo Néstor Morales). Y ahí seguimos, hablando de estereotipos colombianos, viendo a ver cómo se generalizaba a la máxima potencia, contando historias de monjas gordas y de lo triste que es el español mexicano.
Pero, mientras tanto, el pueblo gozó. El pueblo fue feliz. El pueblo se deleitó al corroborar que llegaba el error que todos sabíamos que algún día llegaría. (Y, por su parte, Actualidad Panamericana muy bien podría tener más vistas que los medios que se precian de dar noticias “de verdad”).