Efraín Torrado, quien fue senador de La U hasta hace un año y ha sido salpicado por su rol en el cartel de la contratación que se robó a Bogotá, acaba de recibir un puesto en la nómina diplomática del presidente Juan Manuel Santos: desde ayer es el nuevo cónsul en Chicago.
Torrado es un político norsantandereano que llegó al Senado en 2006 con La U, tras haber sido concejal liberal de Cúcuta durante dos períodos, y que se reeligió en 2010 en 83 mil votos. Su grupo político creció tanto que en 2007 eligió a su hermano Édgar en el Concejo de Bogotá, también por La U. Aunque Édgar no busco reelegirse en 2011 y Efraín tampoco en 2014, impulsaron a la hoy concejal Sandra Jaramillo.
Los dos hermanos han sido mencionados varias veces en el cartel de la contratación durante la alcaldía de Samuel Moreno y -según varias versiones de prensa de 2013- la Fiscalía le pidió a la Corte Suprema investigarlos por presunto tráfico de influencias. El año pasado Édgar fue objeto de extinción de dominio por las investigaciones del carrusel.
En el informe que el hoy alcalde Gustavo Petro, el concejal Carlos Vicente de Roux y el ex senador Luis Carlos Avellaneda hicieron sobre la contratación, contaron que cooperativas ligadas a los Torrado celebraron contratos por más de 160 mil millones con la Secretaría de Integración Social (equivalentes al 28 por ciento de la contratación de esa entidad). Ellos señalaron ese hecho como claro un indicio de favoritismo de los Torrado, además de que -si bien contrataban desde antes con el Distrito- se dispararon con Moreno.