Ayer el Tribunal Superior de Bogotá negó la tutela que presentó el profesor Renán Vega Cantor en contra de La Silla Vacía, que un juez en primera instancia había fallado parcialmente en favor de Vega.
Como eso tumba la decisión del juez de obligar a La Silla a eliminar dos notas y publicar una rectificación, las volvemos a publicar (“La pifia histórica de Renán Vega” y “La versión de Renán Vega sobre los 53 casos de abuso sexual”) y despublicamos la rectificación.
La tutela del profesor Vega buscaba que la Silla tuviera que despublicar cuatro notas, pues alegaba que le violaban sus derechos a la honra, buen nombre y la dignidad humana.
Hace un mes y medio el juzgado le dio la razón al profesor sobre dos notas y no sobre otras dos, pues de entrada vio que en esos dos casos había solicitado la rectificación muy tarde. La Silla cumplió esa sentencia dentro del plazo que le dio la juez y la impugnó. En esa apelación la sala penal del Tribunal le dio la razón, pues La Silla demostró que Vega no le había solicitado una rectificación al medio antes de presentar la tutela.
“La sala considera pertinente reiterar que el señor Renán Vega Cantor ejerció el derecho de réplica y pidió fuera realizada por el medio de comunicación (portal La Silla Vacía) y esa organización accedió a tal pretensión, como le comunicó oportunamente, por consiguiente no es cierto que haya agotado el requisito de procedibilidad de la previa “petición de rectificación”.
La historia de la tutela
El debate entre el profesor Vega y La Silla Vacía arrancó el 8 de mayo del 2015, cuando publicamos la nota “La pifia histórica de Renán Vega”, que cuenta que su informe para la Comisión Histórica incluía un dato que llamó la atención de varios medios sobre la supuesta existencia de 53 casos de abuso sexual.
“En uno de los casos más sonados [de abuso sexual], en Melgar y en la vecina Girardot, 53 menores de edad fueron abusadas sexualmente por mercenarios, quienes además filmaron y vendieron las cintas como material pornográfico. También en Melgar, un contratista y un sargento de Estados Unidos violaron a una niña de 12 años en el 2007 (...)”, dice el informe.
Pero después de publicado, el profesor Vega le dijo al periodista Manuel Rueda que “lo de los 53 casos era una cifra que había oído en el 2004, pero que no recordaba en qué canal”. Y añadió que la académica alemana Anna Kucia ya había usado ese dato, aunque ella de 53 mujeres que participaron en videos pornográficos grabados por militares gringos pero no de víctimas de abuso sexual.
Colombia Reports -uno de los primeros medio en resaltar el dato de Vega de los 53 abusos- encontró estos hechos y sacó una rectificación con un mea culpa público por haberle creído al profesor.
Todo esto lo contó La Silla en la nota. Ante ello, el 11 de mayo el profesor envió un correo electrónico exigiendo el derecho a la réplica (no una rectificación) por “el injurioso artículo que publicaron el 8 de mayo” y envió un escrito de respuesta con su versión sobre el dato de los 53 casos de supuesto abuso sexual.
La Silla accedió el 14 de mayo, en la segunda nota que luego entuteló Vega y que incluía la carta que el profesor había adjuntado a su correo.
Sin embargo, el 17 de mayo Vega envió otro correo electrónico en el que manifestó su inconformidad por el manejo que este medio le había dado al asunto.
La Silla, a través de su directora Juanita León, volvió a responder el 19 de mayo: “recibí tu carta y me gustaría que nos tomáramos un café y podamos hablar de este episodio. Tienes tiempo esta semana?”, dijo.
El 22 de junio, más de un mes después, Vega le escribió de nuevo a nuestra directora pero no respondió a la invitación a discutir directamente el asunto. En cambio, abrió un nuevo debate: le solicitó que le comunicara al periodista y sub editor de La Silla, Juan Esteban Lewin, que le pedía la rectificación de otras dos notas distintas y publciadas hacía ya varios meses: “De izquierda a derecha, los miembros de la Comisión Histórica de La Habana” y “Coincidencias y divergencias de los 14 relatos sobre la guerra”.
Los nuevos argumentos de Vega eran al calificarlo como académico de izquierda, lo ponían en peligro (aunque no se refirió a ningún hecho que lo demostrara) y que eran peyorativas, sin decir nunca que esa calificación fuera falsa. La Silla le respondió que no entendía cuál era el hecho falso por el que pedía rectificación y le reiteró la invitación a discutir cara a cara.
Vega no se volvió a comunicar con La Silla sobre ninguno de los dos asuntos.
Casi un año después, el 13 de abril de 2016, interpuso una tutela por las cuatro notas, en paralelo a otras dos tutelas contra el columnista de Semana Alfonso Cuéllar (esa tutela la ganó Vega en primera instancia) y contra el blogger de El Tiempo Andrés Sánchez (esta la perdió el profesor), quienes habían usado la información de La Silla de las dos notas sobre los 53 supuestos abusos sexuales para escribir otras notas.
No entuteló a Univisión ni a Colombia Reports, que eran las fuentes citadas por La Silla.
El juzgado le dio la razón a Vega sobre las dos notas que se refieren a esos supuestos abusos, pero no sobre las dos que dicen que es de izquierda. Sobre éstas no estudió el fondo porque de entrada dijo que la tutela no era procedente, porque Vega se había demorado demasiado en presentarla y nunca había señalado cuál era la falsedad o inexactitud de La Silla.
La Silla cumplió esa sentencia: concedió la rectificación, despublicó las dos notas que hacían referencia al dato de los 53 casos de supuesto abuso sexual y le pidió excusas públicas al profesor Vega.
Sin embargo, el nuevo fallo le da la razón a La Silla en que Vega nunca solicitó la rectificación de esas notas y por lo tanto revoca esa parte de la sentencia anterior, por lo que La Silla las vuelve a publicar. Y, como publicamos una nota de rectificación también acatando la decisión que se cayó, ahora la despublicamos.
El Tribunal encontró de entrada que Vega no había cumplido con los requisitos para presentar una tutela, como es pedirle antes a La Silla que rectificara, de forma oportuna, y argumentando qué dato era errado, inexacto o falso y por qué atentaba contra sus derechos.
De hecho, la sentencia asegura que el contenido de la réplica que solicitó el profesor Vega “no señaló de forma exacta cuál información consideraba errónea, inexacta o falsa y que conllevó a la afectación de sus prerrogativas constitucionales”.
Ahora Tribunal Superior de Bogotá remitirá el expediente a la Corte Constitucional que decidirá si lo revisa y emite una sentencia final, o si el proceso terminó con la decisión del Tribunal.
Vea la sentencia completa del Tribunal Superior de Bogotá by lasillavacia

La Silla
- Ayer el Tribunal Superior de Bogotá negó la tutela que presentó el profesor Renán Vega Cantor en contra de La Silla Vacía