Terminó la campaña anual de Súper Amigos y quedamos felices. Tenemos 593 nuevos Súper Amigos, que nos donaron un total de 87,540.000 millones de pesos.
En realidad nos donaron 94 millones, pero uno de los Súper Amigos se equivocó y nos donó 8 millones de pesos porque no sabía que el límite era un millón de pesos. Aunque lo consignó en un banco de Barranquilla de manera anónima, afortunadamente supimos quién era y, luego de explicarle el tope, le pudimos devolver siete millones.
Nuestra meta inicial eran 750 Súper Amigos. Aunque no la alcanzamos, este año rompimos el récord en recolección de fondos y es el segundo en el que hemos conseguido más Súper Amigos. Sentimos que tener casi 600 usuarios dispuestos a respaldar económicamente lo que hacemos es un gran espaldarazo al periodismo independiente en el que creemos.
De los 593, 263 ya eran Súper Amigos antes, lo que los hace una parte fundamental de La Silla Vacía y nos confirma que trabajar duro y siempre es un esfuerzo que vale la pena continuar.
Trece por ciento de nuestros donantes llevan leyendo La Silla desde las elecciones de 2014, 20 por ciento la llevan leyendo desde este año y 67 por ciento la llevan leyendo desde mucho antes. Es decir, entre más nos leen más nos apoyan.
Un dato interesante de este año es que 75 de nuestros 327 nuevos Súper Amigos publican en La Silla ya sea como empleados, blogueros o miembros de las redes de La Silla Llena, lo que nos convierte en una verdadera comunidad de creación colaborativa.
Las razones para donar fueron en casi todos los casos las mismas: quieren que el periodismo de La Silla continúe. Muchos valoran también el esfuerzo regional que estamos haciendo con las sillas Caribe, Pacífico y Santanderes.
Como la plata que recaudamos la destinaremos principalmente a incursionar en la producción de vídeos y en fortalecer nuestras investigaciones sugirieron varios temas que se podrían resumir en diez grandes grupos:
Varios propusieron temas relacionados con corrupción, grandes contrataciones y mafias empresariales.
Otros pidieron que investiguemos temas relacionados con la salud: desde títulos en especialidades médicas diferentes a las cirugías plásticas hasta incentivos perversos en la industria farmacéutica y el negocio de las nuevas enfermedades.
Un tercer grupo de ideas de investigación giran alrededor de temas con implicaciones morales como la situación de interrupción voluntaria del embarazo en Colombia, la muerte digna o la eutanasia.
Otros sugirieron investigaciones relacionadas con el medio ambiente, la lucha contra el cambio climático y la situación de los organismos modificados genéticamente en Colombia.
Una quinta línea está relacionada con impuestos y regalías: desde quiénes se benefician con las exenciones, manejo de regalías en pequeños municipios, hasta determinar qué tanto reducen la desigualdad.
Una sexta línea está relacionada con la implementación del Acuerdo de Paz: el asesinato de líderes, el servicio militar obligatorio, veeduría de la desmovilización de las Farc, responsabilidad del Estado, políticos y empresarios en el paramilitarismo, proceso con el ELN, politización de la unidad de víctimas, el rol del arte en la construcción de paz.
El séptimo grupo de ideas giran sobre Bogotá. Hay una clara necesidad de que cubramos mejor la capital y es un compromiso de La Silla hacerlo mejor a partir del próximo año.
Hay un grupo grande que propone investigar temas más sociales: las condiciones de los migrantes venezolanos en Colombia, las compañías preicfes, la situación de los recicladores que andan con su carreta a cuestas en Bogotá.
Hay un interés en el mundo de ciencia y tecnología: Colciencias y el estado de la investigación en Colombia, el fraude científico en Colombia, la política pública sobre tecnología.
Otros propusieron investigar mejor el mundo de los comentaristas de noticias y sus conflictos de interés.
Y por último, están los temas más tradicionales de La Silla: investigar a fondo los candidatos presidenciales, las gobernaciones de Luis Pérez y Dilian Francisca Toro, y las redes políticas.
Con los casi 90 millones de pesos que recaudamos, usaremos una parte para comprar micrófonos, una cámara de video, software de edición y un entrenamiento en producción video. Y el resto para hacer cinco grandes investigaciones durante el 2017, algunas de las cuales someteremos a votación de los Súper Amigos.
Así como en el pasado gracias a nuestros Súper Amigos logramos hacer el Quién es Quién, lanzar La Silla Llena y la Silla Pacífico, esperamos que el 2017 sea el año en el que la saquemos del estadio con nuestro periodismo investigativo.
Una vez más, damos las gracias a nuestros Súper Amigos. Su generosidad no solo nos ha alegrado este fin de año sino que nos anima a seguir haciendo nuestro trabajo cada vez mejor.